domingo, 4 de febrero de 2018

cada vez que te veo orar...

Y no me puedo concentrar, ya que miro tu existencia tan hermosa mientras te arrodillas para rezar, amo tus ojitos que miran con tanto amor el altar. Pero mas me gustas tú que te logras empapar con la presencia de Cristo en ese lugar. Es chistoso que aunque pasen mil años, siempre que te veo algo en mi empieza a tiritar, creo que se arraigó esa emocion que me hace recordar esa efervescencia de amar y dejarme amar, de coquetear y dejarme coquetear.
Ahora tengo ganas de tomar tu mano y contigo rezar, pero sé que debo alejarme y empezar a avanzar. No sirve querer a alguien que no te quiera escuchar, ya que en la escucha uno aprende a amar. No sirve que te escuche y me preocupe de tu realidad si en enamorarme todo sera unilateral.
Aun asi me encanta verte orar, y te cuido aunque sufra como tonto por reavivar, ese fuego de mi alma que te quiere abrigar, quitarte el frío y una sonrisa en ti formar. Aunque lejos e podido estar y como un aguila atento observo tu caminar, me hace feliz verte crecer en lo espiritual, y me pone triste que no valoraras a un hombre que sabe como amar. Espero que algun dia puedas valorar mis emociones sinceras por ti y por tu forma de pensar...espero que no sea tarde, para tomar tu mano y asi ponernos a orar....espero que no sea tarde, sino quizas, otra persona Dios en mi vida pondrá.

" Todo cambia menos el cielo y sus nubes de colores"

No hay comentarios:

Publicar un comentario