miércoles, 12 de octubre de 2016

Como las estrellas que miro desde aqui

Cuando miro las estrellas se que aunque te vea en ellas no te puedo tener...porque tu elegiste tu camino y yo el mio, porque no estoy para ratos...como esa estrella fugaz que pasa veloz sobre el cielo..
Porque no te quiero bajar del cielo y transformarte en algo que no eres....prefiero mirarte desde aqui y admirar esa belleza que desenvocas en las estrellas, sin poder tenerte, sin poder sentirte....es lo mejor, es lo ideal, es lo peor, es mi realidad.

"Todo cambia menos el cielo y sus nubes de colores"

Seducción pura, real.

Acaricias mis tatuajes lentamente con tus manos frias que logran hacer reaccionar a mi piel cada vez que siento tu yema en mi cuerpo, se que odias los tatuajes pero permites que los mios rocen tu piel mientras nos besamos en tu casa. Poco a poco nos encontramos en el silencio y dejamos que nuestros cuerpos lo digan todo, no a través de un sexo desenfrenado, sino que solo a través de nuestros abrazos, nuestras caricias, nuestros sonidos y miradas...sin palabras. Siento tu corazón latir y tu el mio, te acaricio el rostro y tu mi torso, nos miramos por unos minutos y sentimos esa presión de sentimientos...esa es la verdadera seducción..aquella que incluso con miradas desde la distancia te recorre el cuello y te cambia el ritmo de la respiración.

"Todo cambia menos el cielo y sus nubes de colores"

"Fumate mis besos"

Me encanta la forma en que fumas, tan delicada, tan seductora, tan provocativa. Y aunque odie el cigarro, idolatro tanto tus labios que no importa que toques las cosas que odio...al final termina siendo mas fuerte mi atracción por ti que mi odio a algo.
De hecho envidio al cigarro que deseas, que besas, que fumas como si no hubiera algo mejor, envidio a ese cigarro que puede tocarte y llegar a lo profundo de tus pulmones. Pero en algo te equivocas, hay algo mejor que la sensación de un cigarro en tus labios, ¿sabes que es?, la sensación de un beso, esos besos que deseas, que te puedes fumar, pero que no te destruye sino que construye. Construye emociones, deseos, pensamientos, crea excitación, te acelera al corazón y sobre todo no llega a tus pulmones......sino que al fondo de tu alma, a tu punto g espiritual, a tu ultima puerta del chakra. Eso es mejor...mis besos......esos que nunca podré darte.

"Todo cambia menos el cielo y sus nubes de colores"

lunes, 3 de octubre de 2016

Café Thomson "Evento especial nocturno: Cumpleaños feliz"

Café thomson
4 de octubre 2016
3:00 a.m

Escucho la música que hace vibrar mi corazón, hace vibrar mi cuerpo como si cada celula de mi ser quisiera moverse al ritmo de la canción, abro mis ojos después de disfrutar esa sensación y a la distancia te veo, te admiro tan sutil, con tus movimientos simples pero coquetos, discretos pero bulliciosos. Te miro fijamente bajo las luces que se mueven sin parar y sin pensar cruzas tu mirada con la mia, como sintiendo en tu piel que te miro, como si sintieras mi presión, mis pensamientos. Me sonries suavemente, mientras yo no quito la mirada de ti, mi corazón cada vez palpita mas fuerte rompiendo el compás perfecto que llevaba con la canción que bailan todos. Decido quitar mi mirada de ti, tu te giras y sigues bailando como si nada hubiera pasado, pero en esos segundos que duraron años, nuestra seducción se encontro, comimos del alma del otro.
Tomo un vaso, me sirvo un poco de vodka, de ese que tiene frambuesas que giran sin detenerse dentro de la botella y que siempre te tientan para que uno se las coma, dejo el vaso en la mesa y  tomo dos hielos con la mano descubierta, sin sentir nada de frio en la yema de mis dedos y las lanzo dentro de mi trago, tomo la bebida blanca y la lleno hasta arriba. Sin pensarlo tanto tomo el vaso y bebo la mitad  entre pocos sorbos, se siente ese calorcito pasar por mi garganta calentando mi cuerpo, pero no mi mente ni mi alma...esas ya estaban que ardían. Cuando dejo de beber te veo frente a mi, sonriente, pones tus manos sobre las mias, que sostenían el vaso y lo acercas a tus labios bebiendo solo un poco, pero despacio, como si en ese pequeño sorbo quisieras sentir todo el sabor que posee, en ese momento nuestras miradas vuelven a estar fijas y yo solo deseo poder sentir tu sabor, como tu sientes el ese trago. Sin que pueda decir nada te vas y me dejas con esas ganas de vivirte, me pongo de espaldas en el bar y miro hacia el techo donde está esa luz que gira sin detenerse iluminando toda la cocina....y me pongo a pensar:
"Que bebere ahora si mis labios desean otra cosa"


"Todo cambia menos el cielo y sus nubes de colores"